Proyecto de rehabilitación en el corazón de Santa Cruz, centrado en la transformación de la última planta y azotea de un edificio catalogado, con una extensión de 200 m2. Este espacio se ha convertido en un ático único, distribuido en dos estructuras interconectadas por una terraza común que ofrece vistas espectaculares de la ciudad. Esta intervención se destaca por su singularidad, diseñada a medida para satisfacer las necesidades y gustos específicos de los propietarios. Las estancias independientes permiten que los espacios exteriores se fusionen armoniosamente con los cálidos interiores, creando así una experiencia de vida excepcional.